En un principio, no he considerado la opción de aportar mi granito de arena, debido a que detrás de ella hay mucha gente inversora que tiene muchas más posibilidades de hacerlo que yo, ya que son los que realmente se lucran en todo este “negocio†que en definitiva es la web 2.0. Sin embargo, he desistido de ello porque creo que desde aquí día a día contribuyo, en la medida de mis posibilidades, a desarrollar ese concepto. Sin tantos visitantes en mi blog, sin tantos contactos en la red… pero creyendo firmemente en el espíritu colaborativo que es la web 2.0, entendida como yo la entiendo: colaboración, conocimiento creado por todos y para todos, dónde todos nos beneficiamos de lo que hacemos y hacen los demás y dónde debe primar el espíritu de ayuda.
↧